Premio RWJF Cultura de la Salud 2020-2021

El viaje “liderada por la comunidad” del condado Howard hacia la equidad en la salud.


 


Denise Boston estaba en el noveno grado cuando ella y su familia se mudaron al condado Howard, en Maryland, en 1970 en busca de una vida mejor en la nueva comunidad de Columbia.

Los atraía la visión del planificador urbano y promotor inmobiliario James Rouse, quien creó lo que es hoy la segunda ciudad más grande de Maryland—ubicada entre Baltimore y Washington, D.C.—a fines de la década de 1960, engalanada con espacios verdes y conocida como un “jardín para cultivar personas.”

Cerca de 20 años después de que la familia Boston arribara, los padres de Erika Strauss Chavarría hicieron su hogar en este condado con la misma intención.

Hoy, ambas son dos de los muchos residentes del condado Howard que laboran para crear una comunidad modelo en la que todos puedan prosperar: Dra. Boston es la primera administradora de equidad y prácticas de restauración del condado Howard, y está a cargo de escuchar a los residentes y de asegurarse de que las políticas, prácticas y servicios del gobierno local sean equitativos. Strauss Chavarría enseña español en su alma mater, Wilde Lake High School, mientras administra la organización de justicia social y alimentaria sin fin de lucro Columbia Community Cares.

“Tenemos un serio compromiso con ayudar a todos”, dice Angela Cabellón, directora de innovación del condado Howard. “Y lo estamos haciendo de una forma basada en datos y liderada por la comunidad misma”.

Condado Howard, Maryland

Los líderes de la comunidad, los socios y los residentes transfieren los recursos a quienes más los necesitan.

Buena parte de los habitantes del condado les va a ir bien de todas maneras. Debemos centrarnos en los habitantes que podrían no estar bien, y debemos asegurar que todos vivamos con la mejor calidad de vida posible.

Calvin Ball, Administrador Condado Howard, Maryland

La filosofía intencionalmente inclusiva del condado se inspira en parte en lo que Rouse buscó lograr. Hoy, el condado Howard ha dado muchos pasos para garantizar un liderazgo diverso y equitativo, y para fortalecer la equidad de oportunidades, de acceso a los beneficios que llevan a la buena salud y de participación cívica entre sus 325.000 residentes. También han trabajado para crear vivienda asequible con dignidad, para mejorar la fuerza laboral y las oportunidades comerciales para quienes antes se quedaron rezagados, al tiempo que toman un enfoque equitativo hacia la seguridad comunitaria.

“Buena parte de los habitantes del condado les va a ir bien de todas maneras”, dijo Calvin Ball, primer administrador negro del condado Howard, elegido en 2018. “Debemos centrarnos en los habitantes que podrían no estar bien, y debemos asegurar que todos vivamos con la mejor calidad de vida posible”.

Un ejemplo perfecto de estos logros es el renombrado sistema escolar del condado. La mayoría de los estudiantes se desempeña bien. De hecho, cerca de 94% de los estudiantes elegibles se graduaron en 2020. “¿Pero, cuando se desmenuzan los datos, quién se está rezagando?” pregunta Ball.

Estudiantes viajando en bicicleta para llegar a Dunloggin Middle School. Las políticas de “Complete Streets” del condado Howard priorizan la seguridad para todos los medios de transporte.
Denise Boston, administradora de Equidad y Prácticas de Restauración del condado Howard durante una junta del Comité Asesor de Equidad.
El banco de alimentos del condado Howard fue diseñado para asemejarse a un supermercado en donde cada persona puede elegir sus propios alimentos.

 

La respuesta es, los estudiantes de raza negra, en especial los niños, dijo Strauss Chavarría, quien laboró junto con otros residentes para desarrollar las primeras políticas de equidad escolar, que fueron puestas en efecto por el gobierno del estado de Maryland y fueron aprobadas por la junta directiva del sistema escolar del condado Howard en 2020.

“Quisimos asegurarnos de que las políticas fueran eficaces”, dijo Strauss Chavarría. Una vez sean implementadas en su totalidad, aumentarán la equidad en todos los aspectos del sistema de educación, desde la alfabetización temprana, y las suspensiones y expulsiones, hasta el proceso de matrículas en clases avanzadas y la tasa de graduación.

En agosto, el equipo de trabajo por la equidad racial en el condado, compuesto por más de 60 investigadores comunitarios, políticas, ejecutivos empresariales y de organizaciones sin ánimo de lucro, estudiantes y activistas, hizo recomendaciones de gran alcance que están estudiando políticas. Incluyen abogar por una salario mínimo más elevado a nivel estatal, hacer el cuidado infantil más asequible para los trabajadores de menos recursos, combatir la segregación en algunos vecindarios permitiendo diversos tipos y precios de vivienda, y removiendo las barreras en la participación de la comunidad en el proceso legislativo.

El condado ya cerró la brecha en favor de hogares cuyos ingresos no son suficientemente bajos para recibir servicios sociales de los gobiernos federal y estatal pero que luchan para mantenerse a flote financieramente. Un cambio en las políticas públicas del condado expandió la elegibilidad de muchas de estas familias a programas como bancos de alimentos y cuidado infantiles.

Obtener el Premio Cultura de la Salud reafirma el espíritu compasivo del condado y la lucha por un futuro siempre mejor, con una definición amplia de lo que es la buena salud, y con un énfasis en llevar a cabo cambios a las políticas y sistemas con la meta de fortalecer la equidad y la remoción de barreras para todos.

“Nos inspira para continuar con nuestros logros, para seguir esforzándonos”, dijo Ball. “Espero que inspiremos también a otras jurisdicciones del estado y del país”.

A young girl tending plants in a greenhouse.

Premio Cultura de la Salud de RWJF

El Premio Cultura de la Salud honra y enaltece a las comunidades estadounidenses que trabajan por mejorar la salud, las oportunidades y la equidad para todos.